Vuelta a Trujillo
A tour for the province of Trujillo, in the Venezuelan Andes
Español
(English after)
Hace una semana hice una vuelta por el Estado Trujillo, en los Andes Venezolanos, en mi ruta siguiendo el café, otra experiencia increíble, un reencuentro con mi infancia y nuevamente con la Venezuela profunda.
Mi familia de mi padre es de Valera, la ciudad más grande de Trujillo, y cuando niño todas mi vacaciones empezaban allá en la casa de mi abuela.
Pero el viaje de Guanare a Valera siempre fue traumático para mi, sin exagerar ni dramatizar mucho, la pasaba muy mal por la ruta de Boconó, siempre ha sido un estrecho camino a través de la selva húmeda, con muchas curvas, mareaba mucho y nunca pude disfrutar del paisaje.
Y ahora de adulto decidí redescubrir esta zona, verla ahora con otros ojos, y disfrutar de una de las rutas más bonitas de Venezuela, un viaje solitario de mucha reflexión.
Empecé en mi ciudad natal, Guanare, donde hay una encrucijada entre el llano y los andes, a solo solo minutos de recorrido la vegetación y la temperatura van cambiando, ya se esta entrando en las montañas
English
A week ago I did a tour for the Province of Trujillo, in the Venezuelan Andes, following my route of the coffee, another amazing experience, a reunion with my childhood and again with the deep Venezuela.
My father’s family is from Valera, the biggest city of Trujillo, and as a child all my vacation began there, in my grandmother’s house.
But the trip from Guanare to Valera was always traumatic, without exaggerating or dramatizing too much, the route of Boconó was always very bad for me, it has always been a narrow road through the rainforest, with many curves, I got car sick a lot, and I never could enjoy the landscapes.
And now as an adult I decided to rediscover this region, see it with other eyes, and enjoy one of the most beautiful scenic drives in Venezuela, also was a solitary journey to think a lot.
I started in my hometown, Guanare, where there is a crossroads between the plain and the Andes, just one minute ride the vegetation and temperature are changing, we are already entering in the mountains.
Español
(English after)
El primer pueblo que uno se encuentra es Biscucuy, todavía Estado Portuguesa, donde aparecen las primeras plantaciones de café, que me acompañaran la mitad del viaje.
La primera parada la hice en un pequeño pueblo cafetalero llamado Campo Elías, apenas una plaza y dos calles, con esta curiosa iglesia que desde niño me llamaba la atención, en esta zona están las más importantes plantaciones de café, y según los locales se produce el mejor café de Venezuela, lo que no pongo en duda.
Entre Campo Elías y Boconó voy a pasar la mayor parte del tiempo, adentrándome en la selva con mi cámara, el café se cultiva bajo sombra, y en esta época del año ya el fruto se esta poniendo rojo, listo para la cosecha.
Entre las fincas de café y la carretera encuentro un mundo campesino que no ha cambiado casi nada desde hace un siglo, todavía se ven señales de cuando Venezuela era una potencia mundial productora de café, cuando llegaron los primeros vehículos de motor para trasladar la cosecha, me imagino como debió haber sido todo esto en su máximo esplendor.
Y ahora, a pesar de que hay una revitalización y una lucha por recuperar la producción y la productividad, me sigue pareciendo un sitio solitaria y triste, me sentía mucho más aislado de lo que estaba, los campesinos de los andes son mucho más reservados que en otros sitios de Venezuela.
Hice varias compras de café, cultivado, cosechado, tostado y molido en el lugar, una lastima que no lo encontré en granos, esta molienda era muy fina, ideal para colarlo en manga, pero no sirve para la greca en casa, también compré un gracioso sombrero de paja gigante para protegerme del sol.
English
The first town I found is Biscucuy, where the first coffee plantations appear, I do follow me half of the journey.
The first stop I made in a coffee grower small town called Campo Elias, just a square and two streets, with this unusual church, that as a child really caught my eye, here are the most important coffee plantations in this region, and is produced in accordance with local, the best coffee in Venezuela, which I do not doubt.
Between Campo Elías and Boconó I spend most of the time, getting further in the forest with my camera, the coffee is grown under shade, and at this time of year the fruit is getting red, ready to harvest.
Among the coffee plantations and the road I find a rural world that has barely changed in a century, signs when Venezuela was a world power producer of coffee, when the first motor vehicle to transport the harvest were seen for the first time, I imagine what it must have been all in its heyday.
And now, even though there is a revitalization and a fight to recover the production and productivity, for me still looks like a sad and lonely place, I felt much more isolated than it was, the farmers of the Andes are much quieter than elsewhere in Venezuela.
I made some purchases of coffee, grown, harvested, roasted and ground on site, but was a shame that I not found just the grains, this grinding was very thin, perfect for casting in manga, but not for the greca at home, also buy a giant funny straw hat to protect me of the sun.
Español
(English after)
Boconó apenas lo vi de pasada, no ha cambiado mucho de como lo recordaba, lo que seguía era más montaña, dejaba atrás la selva y el paisaje se iba haciendo más de páramo.
La siguiente parada fue en Burbusay, donde me dijeron era el pueblo de las fresas, de resto no había mucho para ver, lo más interesante fue el camino hasta allá, donde estaban floreando estas flores amarillas que le daban un poco de color al desolado paisaje.
Luego de Burbusay y el páramo de Árbol Redondo hice otro desvío, esta vez para acercarme a la historia, al pueblo de Santa Ana de Trujillo, famoso por allí haberse ratificado el Tratado de Armisticio y Regularización de la Guerra, el 27 de noviembre de 1820, entre El Libertador Simón Bolívar y el general en jefe del ejército español Pablo Morillo, tratado considerado el principal antecedente del Derecho Internacional Humanitario actual.
Visité la famosa plaza del Armisticio, donde está la estatua del abrazo entre Bolívar y Morillo, en ese momento estaba llena de niños de escuela a los que les estaban contando la historia del famoso encuentro.
Desgraciadamente al final de esta parte del viaje ya de bajada, nuevamente como en mi niñez, maree, y nuevamente me sentí terrible, pero logré llegar a Valera y a la casa de mi abuela.
No se cuantos años tenia sin visitar esta casa, fue una vuelta al pasado, estaba exactamente como la recuerdo, con todos sus detalles súper recargados, las mismas fotos y retratos, el mismo olor, afortunadamente Yo no sufro de nostalgia.
English
I just saw Boconó by passing, has not changed much as I remembered, what followed was more mountain, leaving behind the forest, the landscape became more moorland.
The next stop was Burbusay, where I was told was the village of the strawberries, nothing more to see, the most interesting was the way there where these yellow flowers were growing, that gave some color to the desolate landscape.
After Burbusay and the wilderness of Árbol Redondo (Round Tree) I made another detour, this time to approach the history, the town of Santa Ana, famous because there was ratified the Armistice Treaty of Regularization of War the November 27, 1820, between El Libertador Simon Bolivar and the commanding general of the Spanish army Pablo Morillo, treaty considered the main antecedent of the current International Humanitarian Law.
I visited the famous Armistice square, where is the statue of the embrace between Bolivar and Morillo, it was full of school children who were telling them the story of the famous encounter.
Unfortunately at the end of this part of the journey, descending the mountains, again as in my childhood, I get sick, and again I felt terrible, but I made it to Valera and to my grandmother’s house.
Do not know how many years had without visiting this house, it was a return to the past, it was exactly as I remember, with all the recharged details, the same photos and portraits, the same smell, fortunately I do not suffer from nostalgia.
Español
(English after)
A mi abuela la he visto más seguido que a su casa, ella al igual que Yo nos gusta viajar y hemos coincidido en algunas ciudades del mundo antes, la última vez fue en Buenos Aires, mientras Yo todavía vivía allá.
Como parte de la tradición de ir a Valera no podía faltar el viaje a La Puerta y comprar las famosas hallacas de caraotas picantes, una delicia, de vuelta entre en Carmania, lugar donde El Libertador Bolívar hizo El Decreto de Guerra a Muerte, durante la Campaña Admirable.
También había que ir a Isnotú, a ver el santuario a José Gregorio Hernandez, Yo no soy una persona religiosa, pero este es un sitio emblemático del estado y también tradición familiar pagar tributo al santo.
Al día siguiente hice una visita a la Ciudad de Trujillo, la capital del estado, allá visité algunos sitios históricos, nada muy sobresaliente, no me interesó ir a ver la estatua de la Virgen de La Paz, ya de niño me había aburrido mucho y ahora de grande no creí que iba a ser diferente.
English
I’ve seen more often my grandmother than her home, she just like me, she like to travel and we have met in some cities around the world before, the last time was in Buenos Aires, while I still lived there.
As part of the tradition of going to Valera could not miss the trip to La Puerta, and buy the famous spicy beans hallacas, delicious,and on the way back I stop in Carmania, where the Liberator Bolivar made The Decree of War to Death, during Admirable Campaign.
Also had to go to Isnotú to see the shrine to Jose Gregorio Hernandez, I am not a religious person, but this is a landmark site, and is a family tradition pay tribute to the saint.
Español
(English after)
Luego de un par de días de descanso con mi abuela partí de regreso a Guanare, esta vez tomando la ruta de Carora, un contraste con lo que venía viendo, por ser una zona árida, al borde de la montaña, también una de mis rutas favoritas, de niño siempre me imaginaba viviendo en este sitio.
En Carora hice una parada para conocer su casco histórico, muy bonito y muy bien conservado, en otro momento tendré que volver y hacer un recorrido más formal.
Fue un viaje muy completo, que disfrute mucho, en el que tome decisiones importantes respecto a mi vida personal y lo que ando buscando, no logré calmar toda la ansiedad que me había llevado, pero si empecé a ver una ruta, hay un largo camino todavía por recorrer.
English
After a couple of days of rest at my grandmother, I went back to Guanare, this time taking the route of Carora, in contrast to what had been seeing, this is an arid area bordering the mountain, is also one of my favorite routes, as a kid I always imagined living on this place.
In Carora I made stop to see the old town, very beautiful and very well preserved, another time I’ll have to go back and do a more formal visit.
It was a very full trip, which I really enjoyed, in which make important decisions about my personal life and what I’m looking for, fails to calm all anxiety that had taken with me, but I began to see a path, there is still a long way ahead.
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